Hoy 4 de abril se conmemora un nuevo aniversario del asesinato del docente y activista sindical Carlos Fuentealba ocurrido en 2007 por un Policía de la Provincia de Neuquén (Argentina) durante un operativo realizado para impedir que se realizará un corte de ruta, en el marco de un reclamo salarial realizado por el sindicato docente ATEN, perteneciente a la CTERA.
En aquella jornada la mayoría de los afiliados decidió, como medida de protesta, hacer un corte de la ruta 22, a la altura de Arroyito. La policía provincial recibió entonces la orden del Gobernador Jorge Sobisch de impedir que los manifestantes bloquearan el tránsito. Antes de que se efectivizara la medida, los docentes fueron desalojados con balas de goma, gases lacrimógenos, bombas de pintura y un carro hidrante. Muchos se refugiaron en una estación de servicio cercana, mientras otros eran perseguidos por policías, a pesar de haberse retirado de la ruta.
Tras una conversación entre dirigentes y policías en la estación de servicio, se detuvo el accionar policial y los docentes se retiraron en grupo, a pie y en autos, hacia la ciudad de Senillosa, escoltados por camionetas policiales. Luego, sin aviso, las camionetas policiales se adelantaron a la caravana, encerrándola y reanudando el uso de la fuerza. Fuentealba se encontraba entonces en el asiento trasero de un auto Fiat 147 , cuando un policía de nombre José Darío Poblete, integrante del Grupo Especial de Operaciones Policiales (G.E.O.P.) de la ciudad de Zapala, disparó una granada de gas lacrimógeno hacia el auto, que se encontraba a unos 2 metros de distancia. El cartucho de gas atravesó el vidrio del vehículo e impactó en la nuca a Fuentealba, causándole un hundimiento de cráneo. En el hospital provincial fue sometido a dos operaciones y finalmente murió al día siguiente.
El hecho causó conmoción y un repudio generalizado y llevó a una declaración de huelga general apoyada por las dos centrales sindicales (CTA y CGT). Simultáneamente los trabajadores de la educación, administrativos y docentes de todo el país llevaron a cabo huelgas, movilizaciones y asambleas masivas. A pesar de que las protestas en todo el país pedían el juicio político a Sobisch, la legislatura provincial se mantuvo cerrada durante casi dos meses porque los legisladores del partido oficialista, MPN, no asistieron a las sesiones. Cuando finalmente se reunió la asamblea legislativa y la oposición hizo el pedido de juicio político, el oficialismo lo archivó inmediatamente.
En el contexto de la causa «Fuentealba I», que investiga la autoría material del asesinato, el policía Poblete fue procesado y más tarde condenado a cadena perpetua por el delito de homicidio calificado. Se abrió además una segunda causa judicial, llamada «Fuentealba II», que investiga responsabilidades en niveles superiores de la jerarquía policial y al entonces Subsecretario de Seguridad.
Los compañeros de Fuentealba y gran parte de la comunidad docente continúan conmemorando aquella jornada del 4 de abril como una fecha que simboliza la lucha por la dignidad del trabajador docente, y -a la vez- reclamando la investigación de las responsabilidades intelectuales del asesinato.
Fuentes: wikipedia.org; ríonegro.com.ar; www.ute.org.ar